Los módulos son un modo objetivo de calcular los impuestos de un negocio.
Seguro que ha oído hablar de los «modulos» para referirse a los impuestos de un tienda, un bar o una pequeña empresa de reformas.
En realidad se trata de un sistema de cálculo del IRPF, y en algunos casos del IVA. Para esto se utilizan signos, índices o módulos, intentando simplificar la tarea del cálculo y la liquidación de los impuestos.
IRPF.
Se trata de la llamada Estimación objetiva que viene marcada por unos indicadores, que aproximadamente señalan el beneficio del negocio.
Es un régimen voluntario e incompatible con la Estimación Directa.
Como el cálculo está en base a estos signos, índices o módulos, dando igual lo que se gane realmente, habría que analizar si realmente interesa:
- Si su negocio factura por encima del resultado del módulo, sí le interesa
- Si su negocio factura por debajo del resultado del módulo, debería elegir la estimación directa.
IVA.
Se trata del llamado Régimen Simplificado que viene a indicar mediante unos módulos la cuota de IVA que debe pagarse cada trimestre.
Este régimen está pensado sólo para autónomos y comunidades de bienes que ya tributan en Estimación objetiva del IRPF.
Existe un límite (marcado en la Orden) por encima del cual hay que tributar en régimen general.
Para conocer estos módulos hay que atender a la Orden que el Ministerio de Hacienda publica cada año.



